¿Qué es el visual thinking?
El visual thinking es un método que consiste en expresar ideas en imágenes. En vez de escribir un resumen y escribir la información, se hace un esquema y se dibujan los conceptos. El pensamiento visual te permite organizar y representar nociones abstractas a través de dibujos. Esta técnica ayuda a desarrollar una comunicación eficaz, ya que se pasa de la información lineal de la escritura visual a la comprensión de ideas.
Parafraseando a Einstein, si lo puedes dibujar, es porque lo has entendido. El visual thinking nos ayuda a transmitir información compleja de manera directa para que ésta sea asimilada con mayor velocidad, ya que aprovecha el poder de la imagen en la comunicación. Es más fácil entender las relaciones y diferencias de distintos conceptos si podemos verlo de forma gráfica.
Contenido
- 1 Lo fundamental
- 2 9 tips imprescindibles para aplicar el visual thinking de la forma correcta
- 2.1 1. Elementos básicos para practicar el visual thinking
- 2.2 2. Herramientas para aprender a utilizar el visual thinking
- 2.3 3. Estrategias de visual thinking para reuniones
- 2.4 4. Mapas mentales como estratégia de visual thinking
- 2.5 5. Canvas
- 2.6 6. Metáforas visuales
- 2.7 7. Diagramas de flujo
- 2.8 8. Gráficos
- 2.9 9. “No sé dibujar”
- 2.10 Ventajas y desventajas del visual thinking para estudiar
- 3 Resumen
Lo fundamental
- El visual thinking permite organizar y entender mejor y con mayor velocidad conceptos que, planteados de otra forma, podrían ser más complejos. Los mapas mentales son muy útiles para ordenar ideas, por ejemplo.
- El pensamiento visual ayuda a entrenar y a mejorar la memoria y la comunicación. Los gráficos y diagramas de flujo son especialmente efectivos a la hora de memorizar, ya que el poder captar toda la información organizada en un dibujo facilita su asimilación.
- El visual thinking ayuda a desarrollar el lenguaje visual y la creatividad. Combinar dibujo con técnicas de aprendizaje es una gran manera de ejercitar el lado derecho del cerebro, el creativo a la vez que el izquierdo el encargado del lenguaje.
9 tips imprescindibles para aplicar el visual thinking de la forma correcta
Como otras metodologías de enseñanza o técnicas de estudio, el visual thinking se combinará con diferentes métodos para aumentar su potencialidad. Por ejemplo, sumar el pensamiento visual a las clases se traducirá en un mayor enriquecimiento para los estudiantes. Esta metodología se adapta muy bien a los distintos estilos de aprendizaje (1). Por esta razón, reunimos nueve consejos para que incorpores el visual thinking en tu labor diaria.
1. Elementos básicos para practicar el visual thinking
Aunque los autores afirman que el ser humano aplica las técnicas del visual thinking desde sus orígenes, para empezar a utilizar el pensamiento visual como estrategia de aprendizaje hay unos elementos básicos a tener en cuenta:
- Dibujos: Pueden ser de personajes, objetos, formas geométricas, emoticonos o comics. No tiene que ser una obra de arte.
- Tipografía: Una letra clara, de un tamaño y grosor adecuados para que pueda ser leído fácilmente.
- Recursos: Son los conectores, flechas, divisores, marcos o viñetas que nos ayudarán a establecer relaciones o diferencias. Asigna un significado a cada elemento para que puedas tener más orden y coherencia.
- Diferentes formatos: No existe una única forma de aplicar el visual thinking, así que familiarízate con las distintas opciones para que te sientas más cómodo. Puedes probar con las sketchnotes (pequeñas notas), mapas conceptuales, gráficos, Canvas o diagramas de flujos. ¡No te limites solo a dibujos, aprovecha los memes o gifs!
Si quieres aprender más sobre mapas conceptuales, mira este artículo de Educalink donde desarrollamos con mayor profundidad esta técnica del pensamiento visual.
2. Herramientas para aprender a utilizar el visual thinking
Hay dos herramientas claves que te ayudarán a sacarle el jugo a los beneficios del pensamiento visual: papel y lápiz. Sin embargo, si quieres ir más allá, existen muchas aplicaciones o páginas web que nos pueden ayudar a desarrollar el visual thinking y las competencias digitales.
Así que, si quieres llevar tus competencias de visual thinking un poco más allá, puedes probar con las siguientes plataformas digitales:
- MindMeister o Bubbl.us para crear mapas conceptuales.
- Easel.ly o Canva para crear infografías.
- Pinterest o Symbaloo son muy buenos organizadores visuales.
Estas plataformas son muy útiles, pero si no tienes mucha experiencia usándolas, te recomendamos empezar a realizar tus esquemas manualmente.
3. Estrategias de visual thinking para reuniones
El pensamiento visual es algo propio del ser humano. Desde la prehistoria hemos plasmado nuestra realidad a través representaciones visuales (3). David Sibbet, en su libro Pensamiento Visual, establece tres modalidades básicas del visual thinking (4):
- Sketch Notes: Es el proceso personal de cada individuo de tomar notas de forma visual, registrar conceptos o representar situaciones o ideas. Todos lo hemos hecho alguna vez sin saber que es una técnica de pensamiento visual.
- Graphic Recording: Durante el registro gráfico una miembro del equipo, que ya está entrenado en la técnica, es responsable de resumir visualmente en tiempo real lo que se dice en una reunión. El grupo lo puede ver a medida que se realiza, pero sin interactuar.
- Graphic Facilitation: La facilitación gráfica es similar al punto anterior, pero la diferencia está en que es las personas interactúan y se va reflejando la información visualmente a medida que fluye. Es una estrategia muy útil cuando se hace brainstorming o lluvia de ideas, ya que motiva al grupo a participar y a profundizar más.
4. Mapas mentales como estratégia de visual thinking
Los mapas mentales son una gran manera de aplicar el visual thinking para organizar conceptos y definir las conexiones entre ellos. Esta herramienta te permite observar las nociones y establecer vínculos y jerarquías entre ellas y, así, asimilar las asociaciones existentes mucho más rápido.
Como su nombre lo indica, sirven para definir los territorios que abarca una idea y establecer una ruta gracias a los rangos y categorías que pueda tener cada concepto. Para profundizar más en esta gran técnica de pensamiento visual te recomiendo visitar este artículo de Educalink que contiene mucha información útil sobre los mapas mentales.
5. Canvas
El modelo Canvas surgió como una técnica de visual thinking para la administración estratégica de negocios. Fue desarrollado por Alexander Osterwalder, consultor de negocios e Yves Pigneur, profesor de información y gestión. Lo crearon para organizar visualmente los aspectos claves de los negocios y cómo se relacionan y alimentan entre sí.
La herramienta Canvas permite poner en orden conceptos y procesos al ubicarlos en las categorías que le corresponde a cada uno. Al tener las ideas ubicadas en sus diferentes clases es más fácil entender sus diferencias, similitudes y las fases en las que suceden para así asignarles roles.
6. Metáforas visuales
Esta estrategia del visual thinking es una forma muy sencilla de entender el pensamiento visual. En ella se usan elementos gráficos muy fáciles de comprender por cualquiera. Si quieres mostrar un problema, por ejemplo, dibujas fuego. Para una pregunta, un signo de interrogación. Algo importante, un signo de exclamación.
Se basa en utilizar íconos de carácter universal para dar énfasis a nuestras ideas. La mayor ventaja de esta técnica de visual thinking es que no hay que ser un gran dibujante para aplicarlo. Es muy sencillo de llevar a cabo y los dibujos no tienen que ser perfectos, solo se deben entender. Las señalizaciones de salidas de emergencia, o ubicación de los extintores de incendios echan mucha mano de las metáforas visuales (4).
7. Diagramas de flujo
Otra técnica de visual thinking es la creación de diagramas de flujo. Es una herramienta muy útil para definir de manera sencilla y muy clara los procesos y las alternativas de acción según los resultados de las etapas. Es muy utilizado para los circuitos eléctricos o de programación web, aunque cada vez más se aplica en otras áreas de la vida cotidiana.
Los diagramas de flujo son altamente efectivos para explicar de forma visual cómo funciona la toma de decisiones dentro de un equipo. O cómo se estructuran las tareas de los diferentes roles de trabajo y cómo se alimentan los procesos entre sí. Además, es una buena manera de asegurarse de que todos poseen la misma información y están en la misma página (2).
8. Gráficos
Los gráficos son de esas estrategias del visual thinking que están presentes en nuestro día a día. Tanto que está casi integrado con otras técnicas de aprendizaje. Son muy útiles para ver de forma visual y entender fácilmente, información que podría ser más lenta de procesar si estuviera escrita en un texto o en una tabla.
Existen diferentes tipos de gráficos:
- Los gráficos lineales son muy eficaces para mostrar tendencias.
- Puedes utilizar los gráficos de torta para mostrar proporciones.
- Los gráficos de radar (o araña) tienen gran utilidad cuando queremos evaluar tres o más datos variados.
9. “No sé dibujar”
¡Esa excusa no te librará de esta! Hay grandes noticias para ti: no hace falta saber dibujar para aplicar el visual thinking. El pensamiento visual es de esas técnicas que puede ser utilizada por cualquiera, tenga o no capacidades de dibujo.
Aquí hay algunas recomendaciones para que puedas hacer uso de estas herramientas:
- Empieza por figuras básicas. Las formas sencillas son ideales para comenzar y ganar confianza.
- Puedes utilizar pictogramas, dibujos muy sencillos que representen las ideas básicas. Seguro eres capaz de dibujar una casa con cinco líneas.
- ¡Personajes de palitos! Sí, es la forma más fácil de dibujar la figura humana y no requiere de grandes dotes artísticas. Solo tienes que trazar cinco líneas y un círculo.
Como ves, no es necesario ser un artista para poner en práctica el visual thinking. Es suficiente con dibujar algunas figuras básicas para aprovechar todas las ventajas del pensamiento visual y facilitar tu aprendizaje o el de tus estudiantes.
Ventajas y desventajas del visual thinking para estudiar
Las ventajas de aplicar el visual thinking o pensamiento visual en el aula, en los estudios o en el trabajo son muchas. Es por esto que su uso se ha extendido tanto y se ha convertido en una herramienta casi imprescindible.
Resumen
El visual thinking es una técnica que el ser humano ha utilizado desde que existe. Las pinturas rupestres son ejemplos claros del pensamiento visual. Antes de aprender a escribir, sabemos dibujar. Sus ventajas son muchas y es una herramienta muy poderosa para organizar ideas y procesos y para entenderlos de una forma más fácil y rápida.
Si hay algo que te cueste entender, intenta dibujarlo. Verás cómo hacer uso de estas técnicas te ayudará a comprender mucho mejor los conceptos. Incluso, si eres profe y hay alumnos a los que les cuesta más una materia, estas herramientas supondrán un cambio positivo para ellos.
Al final se resume así: si lo sabes dibujar, lo sabrás explicar y entender. ¿Conoces otra técnica de visual thinking? ¿Ya aplicabas estas herramientas en tu día a día? ¡Déjanos un comentario o comparte este artículo!
(Fuente de la imagen destacada: pixabay 355952/ pexels)
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