La niñez es la etapa más importante en la vida de una persona. En ella, aprendemos casi todo lo que necesitamos para desarrollarnos. Conductas, normas o actitudes aceptables, y las que no. Así como mucho del conocimiento básico para pasar a la adolescencia, y luego a la madurez.

Gran parte de este aprendizaje básico consiste en unas habilidades. Estas son conocidas como habilidades socioemocionales. Y consisten en toda la información que un niño necesita para aprender a convivir, y crecer en sociedad. Estas se pueden desarrollar en diferentes espacios, en casa o en actividades extraescolares. Y también, en el aula.

Lo fundamental

• Las habilidades socioemocionales son básicas para un niño. Le permiten aprender a convivir en sociedad.
• Estas habilidades son herramientas esenciales. Ya que garantizan que el niño pueda crecer como un adulto saludable, tanto física como emocionalmente.
• Estas habilidades se desarrollan sobre todo en casa. Sin embargo, el aula y los profesores son también esenciales. Dado que el niño pasará mucho tiempo en este ambiente. Por ello, es importante que se beneficie de ello.

Todo lo que debes saber sobre las habilidades socioemocionales

En este apartado, explicamos qué son estas habilidades. Para ello, respondemos algunas preguntas, y brindamos información que quizá no habías tenido en cuenta. Hemos recopilado respuestas a las cuestiones más importantes. A continuación, encontrarás todo lo que debes saber sobre las habilidades socioemocionales.

Las habilidades socioemocionales son aprendidas. (Fuente: NeONBRAND: zFSo6bnZJTw/ Unsplash.com)

¿Qué son las habilidades socioemocionales?

Consisten en conocimientos que necesitamos para poder convivir. Es decir, son conductas u habilidades que aprendemos para interactuar. Tanto con extraños como gente de nuestro alrededor. Gracias a estas habilidades, podremos crear y mantener con éxito relaciones e interacciones de cualquier tipo.

Con ellas, podremos reconocer, captar y expresar emociones. Las de otras personas, pero también las nuestras. De esta manera podremos comunicarnos y relacionarnos con nuestro entorno. También, a nivel profesional son importantes. Ya que nos sirven para encontrar un puesto de trabajo, y escalar en el esquema de la empresa, o buscar uno nuevo.

De esta manera, las habilidades socioemocionales nos permiten conocer a los demás. Pero, sobre todo, a nosotros mismos. ¿Qué queremos hacer?, ¿Cuáles son nuestros objetivos?, ¿Qué no queremos? Son muchas las variables que estas habilidades nos permiten detectar y analizar. Por ello, son claves para desarrollarnos en adultos, desde lo social, profesional y personal.

¿Para qué sirven las habilidades socioemocionales?

Las necesitamos para poder convertirnos en adultos maduros y sanos, tanto física como emocionalmente. Gracias a ellas, podremos identificar nuestras necesidades, ambiciones y debilidades. Con esta experiencia en nuestra mano, podemos identificar la misma información en otras personas. De esta manera, conseguiremos relacionarnos con éxito.

Si podemos relacionarnos con los demás, podremos navegar eficientemente los diferentes canales sociales. Es decir, que podremos ser un miembro activo y productivo de nuestra sociedad. Por eso, es tan importante que estas habilidades sean aprendidas desde pequeños.

Así, un niño que entienda e interiorice estos comportamientos será capaz de crecer. Y, llegado el momento, convertirse en un adulto maduro. Una persona que no las ha adquirido. probablemente tendrá serios problemas para convivir en sociedad.

¿Qué tipos de habilidades socioemocionales hay?

Son numerosos los tipos de habilidades socioemocionales que podemos encontrar. Algunos ejemplos de este tipo de conocimiento pueden ser:

• Empatía. Ponerse en la situación de otra persona. Poder comprender su situación y simpatizar con ella.
• Colaboración.Capacidad de trabajar con otras personas. Poder liderar o ser parte de un equipo.
• Toma de decisión. Poder tomar decisiones importantes o bajo presión. Comparar pros y contras.
• Relaciones. Capacidad de identificar e interpretar las emociones de los demás. Poder relacionarse con otras personas del entorno.

Como decimos, estos son solo algunos ejemplos de habilidades socioemocionales. Hay una gran variedad de elementos comprendidos bajo este nombre. Algunos son más importantes que otros. Asimismo, afectan varios niveles, ya que van desde lo personal hacia lo colectivo.

¿Por qué son importantes estas habilidades en los niños?

Las habilidades socioemocionales se pueden trabajar sin importar la edad. No obstante, es importante adquirirlas lo antes posible. Es decir, cuando aún somos pequeños. Ya que es entonces cuando es más efectivo su aprendizaje.

Es posible que un adulto no haya desarrollado correctamente estas habilidades. En este caso, habrá interiorizando conductas inapropiadas o interpretaciones erróneas. Asimismo, habrá tenido muchos años para desarrollar “habilidades” que dificultan su integración en la sociedad.

Sin embargo, un niño es más dúctil. Ya que su mente absorbe información con más facilidad. Por ello, el mejor momento es aprender de pequeños. Si aprende estas conductas con éxito, estará preparado para avanzar a las siguientes etapas de su crecimiento.

¿Cómo puede un niño desarrollar sus habilidades socioemocionales?

Es muy importante que estas habilidades socioemocionales se aprendan durante la niñez. Asimismo, las fuentes de este conocimiento pueden ser muy diversas. Ya que al interactuar con su entorno, el niño es capaz de captar información. Así, los amigos o adultos, que no pertenezcan a su entorno directo, pueden influenciar su conducta.

Sin embargo, hay dos entornos principales donde aprender estas habilidades. La escuela y el hogar. Dado que son las principales fuentes desde donde captamos información. Por ello, es importante que nos aseguremos que estos espacios proporcionen, a los más pequeños, el conocimiento adecuado.

La niñez es una etapa muy importante en el correcto crecimiento de una persona. (Fuente: 14995841: 4784916/ Pixabay.com)

¿Cómo trabajar estas habilidades en el aula?

La escuela es un espacio clave para el desarrollo de un niño. Su conducta, personalidad, conocimientos y aptitudes se desarrollan allí. No solo hablamos de conocimientos conceptuales. Por ejemplo, los referidos a matemáticas o historia. También, están las habilidades socioemocionales se adquieren e interiorizan en el aula.

Interactuando con sus amigos y compañeros, un niño puede adquirir muchos tipos de conocimientos. Es por eso que la figura del profesor es tan importante. No solo para supervisar la información. Si no para fomentar la adquisición de estas y otras habilidades.

Sin la supervisión de los padres, el profesorado debe asegurarse de que el alumnado aprende más allá de lo académico. Es decir, que adquiere y entiende las conductas y comportamientos básicos, que le permitirán interactuar con otros. Sin las necesarias competencias emocionales y sociales, un niño no estará preparado para convivir en sociedad.

¿Cómo trabajar las habilidades en casa?

La otra gran fuente de información, por supuesto, es la familia. Concretamente, los padres. Aunque, el aula también importante en el desarrollo del niño. Dado que se presenta como una zona de confort, donde se puede interactuar y aprender. Pero todo empieza en casa.

Por ello, los padres deben estar completamente implicados en el desarrollo del niño. Ya que las principales conductas que el pequeño interiorizará serán de su padre o madre. Asimismo, el conocimiento puede ser reforzado y fomentado tanto en la escuela como en otros lugares.

Pero son los padres las figuras que el niño tendrá más en cuenta. Así, intentará imitarlos y parecerse más a ellos. Y si los padres tienen malas conductas interiorizadas, aunque no quieran, las pasarán al niño. Porque el niño, solo al estar cerca de ellos, observándolos e interactuando, absorberá sus conductas.

¿Cómo puede la familia afectar el desarrollo de las habilidades socioemocionales?

Los padres son la principal fuente de información no académica. Es decir, que estas habilidades socioemocionales se empiezan a aprender en el hogar. Y lo mismo pasa con la carencia de ellas. Si un padre o madre no ha aprendido con éxito estas conductas, el niño tampoco lo hará.

Lo mismo ocurre si estos padres no están presentes. La ausencia de un padre o una madre puede causar grandes carencias. Ya que el pequeño no tendrá la oportunidad de aprender de ellos. Así, no podrá interiorizar las conductas necesarias porque la principal fuente de información no existe. O por lo menos no es constante.

El niño necesita unos padres presentes e implicados. Asimismo, estos deben ser conscientes de sus propias carencias y errores. Para así, evitar transmitirlo a sus hijos. Ya que entonces también el niño cometerá los mismos errores, y los arrastrará durante su vida.

Finalmente, el aprendizaje de las habilidades socioemocionales empieza en el hogar. El aula, y los profesores, los amigos u otros familiares pueden ser de gran ayuda. Pero no pueden sustituir la responsabilidad de los padres.

El aula es una muy importante fuente de conocimiento. Pero todo empieza en casa. (Fuente: 14995841: 4784917/ Pixabay.com)

¿Qué puede causar habilidades socioemocionales subdesarrolladas?

Las habilidades socioemocionales son vitales para el proceso de transformación entre la niñez y la adultez. Por lo tanto, si una persona no ha interiorizado estos comportamientos tendrá carencias emocionales y psicológicas. Así, no será capaz de desenvolverse con éxito en la sociedad.

En este sentido, no será posible para esta persona relacionarse, y entender sus emociones y las de otras personas. La empatía, la educación o el control de uno mismo, son algunas de las habilidades de las cuales puede carecer.

Llevado al extremo, puede desarrollar conductas poco éticas o, incluso, delictivas. No porque quiera, sino porque puede no comprender lo que está mal. Asimismo, estas carencias le podrían impedir convivir con otros miembros de su sociedad. Además, le costará poder remediar estos comportamientos, y sustituirlos por otros más sanos.

Resumen

Como conclusión, las habilidades socioemocionales de un niño son básicas. Tanto para su desarrollo, como para su convivencia en sociedad. Una persona que no haya interiorizado estos conocimientos podría tener series carencias. Tanto físicas, como sobre todo emocionales. Asimismo, este aprendizaje empieza en el hogar, con los padres.

Por el contrario, un niño que posea estas habilidades crecerá bien. Y se convertirá en un adulto maduro y sano, capaz de escoger los caminos adecuados al largo de su vida. No obstante, tener estos conocimientos no es una garantía de éxito. Ya que a lo largo de nuestras vidas experimentaremos otros condicionantes.

(Fuente de la imagen destacada: Cathy Yeulet: 31054652/ 123rf.com)