Los niños con necesidades especiales atraviesan ciertas limitaciones físicas, emocionales o intelectuales que suelen dificultar su aprendizaje e integración. No obstante, en la actualidad, hay muchas herramientas disponibles para ayudarlos tanto en el área educativa como social.

En este artículo, te brindaremos toda la información que necesitas sobre este tema.

Lo fundamental

• Los niños con necesidades especiales tienen dificultades para desarrollarse en ciertas áreas de su vida. Es fundamental que puedas detectar las limitaciones de tu hijo para ayudarlo en su progreso y evolución.
• Existen diferentes herramientas para abordar esta problemática. También encontrarás diversas apps, como https://www.blog.educalinkapp.com/, especialmente diseñadas para facilitar la organización y el enfoque educativo.
• No cargues con toda la responsabilidad. Recurre a profesionales especializados en esta temática. También hay opciones holísticas, como el yoga o el mindfulness, que ofrecen excelentes resultados.

¿Qué son las necesidades educativas especiales?

El término “necesidades educativas especiales” (NEE) se emplea para describir las limitaciones o discapacidades que dificultan el aprendizaje de los niños.

La mayoría de los niños y niñas tienen dificultades de aprendizaje en algún momento. Sin embargo, con la ayuda de la escuela y el hogar, estos obstáculos suelen ser superados exitosamente.

El caso de los niños con necesidades especiales es distinto. Estos pequeños, por lo general, requieren una ayuda adicional o diferente que los otros niños de su edad. Algunas de estas NEE pueden ser transitorias, mientras que otras necesitarán un apoyo externo permanente.

Es fundamental que podamos detectar las necesidades especiales de nuestros hijos. De este modo, podremos ayudarlos de manera concreta y personalizada. Fuente de la imagen: 123rf.com, Katarzyna Bialasiewicz

¿Qué tipos de necesidades educativas hay?

Los niños pueden tener dificultades en distintas áreas, en función de las necesidades concretas que atraviesen. A continuación, te contaremos cuáles son las más habituales y que características tienen:

• Trastornos de aprendizaje: Estos niños pueden tener dificultades en la mayoría de las actividades escolares o en algunas concretas (como lectura y ortografía, por ejemplo). Los grados de dificultad leves o medios suelen superarse con ayuda escolar adicional. Los más agudos (como síndrome de Down) necesitan una educación personalizada que se adapte a sus necesidades específicas.
• Dificultades emocionales: En este caso, las dificultades educativas pueden estar relacionadas con una baja autoestima o falta de confianza. Estos niños, a raíz de su inseguridad o timidez, suelen tener problemas para expresarse, relacionarse e integrarse socialmente.
• Dificultades psicológicas: Trastornos que afectan el desarrollo cerebral. Generan dificultades en la comunicación, conducta e interacción social. Por ejemplo, Síndrome de Asperger o Trastorno de Espectro Autista (TEA).
• Dificultades físicas: Muchos niños pueden tener una discapacidad física o condición médica que afecta su aprendizaje. Por ejemplo, una discapacidad visual o auditiva. En estos casos, el pequeño necesitará una educación adaptada a sus necesidades específicas. Por otra parte, hay discapacidades de tipo motriz que dificultan la movilidad y la comunicación de quienes las padecen (por ejemplo, espina bífida o parálisis cerebral).
• Altas capacidades: Aunque parezca contradictorio, los niños con un rendimiento mucho más alto que la media pueden tener necesidades especiales. Y es que requieren una educación más avanzada que se adapte a su capacidad intelectual. Estos pequeños se aburren bastante en clase. Como consecuencia, suelen molestar a sus compañeros o maestros.

¿Cómo detectar si un niño tiene necesidades especiales?

Es fundamental que podamos detectar las necesidades especiales de nuestros hijos. De este modo, podremos ayudarlos de manera concreta y personalizada. En esta tabla, te hemos mencionado ciertas conductas características de los niños con necesidades especiales. Ten en cuenta que cada caso es distinto, como así también su nivel de complejidad.

¿Cómo ayudar a un niño con necesidades especiales?

La familia tiene un rol fundamental en el desarrollo de los pequeños. Sabemos que no es fácil abordar ciertas problemáticas infantiles. Sin embargo, hay muchas herramientas disponibles que te facilitarán la tarea.

Existen plataformas virtuales especializadas, como https://www.blog.educalinkapp.com/, que brindan información sumamente útil acerca de diversas temáticas. Además, te resultarán de gran ayuda en la organización y el enfoque educativo.

También hay ciertas estrategias que puedes poner en práctica a la hora de acompañar a tu niño en su desarrollo especial:

• Infórmate: Para comprender las conductas de tu hijo, debes entender los motivos que las generan. Por ello, es importante que te interiorices acerca de los factores médicos, psicológicos y conductuales que pueden afectar su desarrollo.
• Utiliza mensajes simples y claros: Háblale a tu hijo de manera simple, clara, directa y coherente. Según su tipo de necesidad especial, puedes buscar métodos alternativos. Por ejemplo, imágenes, videos, música o gestos, entre otros. Trata de que todo su entorno familiar se maneje de la misma manera.
• Crea rutinas: Las rutinas son muy importantes en los niños. Más aún, si tienen necesidades especiales como autismo o TDAH. Estos pequeños necesitan organizar sus actividades académicas y recreativas. El orden externo se verá reflejado en sus comportamientos y desarrollo.
• Felicítalo por sus logros: Todos los niños necesitan el reconocimiento de sus padres. Y los pequeños con necesidades especiales, todavía más. Por ello, resulta fundamental que felicites a tu hijo por sus logros. No importa que sean pequeños; para él son avances. Si le demuestras tu admiración, le darás confianza y seguridad. Por ende, lo motivarás a seguir adelante y a hacer más cambios positivos.

Resumen

Los niños con necesidades especiales pueden tener ciertas limitaciones para desarrollarse en determinados aspectos. No obstante, hay muchas herramientas y enfoques disponibles para ayudarlos. Las terapias alternativas, por ejemplo, resultan una excelente opción.

El yoga es una de las actividades holísticas más empleadas para niños con TDAH. “A los niños diagnosticados con TDAH, el yoga les proporciona la posibilidad de calmarse y mejorar su concentración. Además de ayudarlos a controlar sus emociones, los asanas (posturas) estimulan las áreas vitales del cerebro y del sistema nervioso central”  (Fundación Querer (2016)).

El mindfulness y las flores de Bach son otras opciones holísticas muy efectivas e inocuas para los niños con necesidades especiales. Por otra parte, también puedes recurrir a terapias especializadas y a tratamientos alopáticos (en caso que fuera necesario). Es muy importante que te informes al respecto con gente seria y profesional. Y que no cargues toda la responsabilidad sobre tus hombros.

No somos superhéroes, sino padres que intentamos, con aciertos y errores, darle lo mejor a nuestros hijos.

(Fuente de la imagen destacada: dolgachov: 57584541/ 123rf.com)